martes, 19 de enero de 2010

Agua negra

Llegue al sitio en un sueño. Había un pequeño puente que conectaba una caseta en el medio del lago con el suelo firme. Todo era gris, espumoso gracias a la neblina. El lago estaba tan oscuro que su color casi era negro. Había un hombre sentado a mi lado en la orilla, el me contó todo... Ellos habían caído al agua por accidente, por descuido, sin desearlo ni esperarlo, luego, en las profundidades aprendían a vivir. Existía otro hombre, "un hombre negro" dijo, quizás se llamaba así por el color del lago, dudo que ese nombre se refiriera a su raza. Ese hombre les enseñaba a respirar bajo el agua. Me sorprendí al escuchar eso, le pregunte como hacían, a lo que me contesto: "es como aquí, solo respiran" e inhaló a modo de representación. Luego dijo: "algunos pasamos noches enteras tirando sogas al lago para los que desean salir. Hay muchos ahí abajo y es muy dicifil que vean las sogas en un lago tan espeso... también hay quienes las ven y no desean volver." Al escuchar al hombre sentí vértigo, me resultaban incomprensibles sus palabras y me invadía la pena al pensar en la gente que esta ahí abajo. El hombre calló un largo rato, miraba hacia el lago, parecía que se había olvidado de que yo estaba allí...
Tiré una soga hacia el agua negra, enseguida comenzó a temblar, algo la sujetó tironeando fuerte, tuve miedo de que me arrastará y me hundiera... No recuerdo quien, pero alguien me ayudo a pujar, salió del agua una mujer joven y aturdida que no podía vernos y pronto se perdió entre los árboles.

1 comentario:

  1. Increíble sueño! Además, tus palabras me fueron guiando hasta el punto de estar en ese lago. Algo así como cuando uno está entrando en un sueño y no sabe en qué momento dejó de estar despierto y pasó a estar soñando.

    linda :)

    beso,

    ale

    ResponderEliminar